Filosofando ando

La naturaleza ha sido y siempre será nuestra gran maestra.  Esta mañana, mientras tomaba mi merienda, fui de nuevo testigo de una situación que ocurre con frecuencia en el balcón, una mariposa estaba aleteando con todas sus fuerzas tratando de avanzar y agotada de no poder hacerlo.  Normalmente hubiera simplemente pensado que era una cuestión de torpeza y por eso los humanos somos una especie superior, porque no estaríamos como ella insistiendo en avanzar a través de un vidrio y por mucho lo contaría como anécdota luego.  

A comienzos de esta semana (7.sep.2020) recibí un correo de Juliana que cerraba diciendo "te dejo la inquietud de tu palabra clave....yo ya encontré la mía" y me dejaba el enlace con las instrucciones . Entré a leer las instrucciones y decidí hacer el ejercicio. Esa noche estuve pensando la palabra, inicialmente se me vino a la mente la palabra amor, por la frase que dijo mi papá y que he observado y repasado tratando de comprender desde ese entonces: "Es tan sencillo, por siempre amor y para siempre amor". Sin embargo al día siguiente cuando abrí mi correo me encontré con la píldora diaria de Krishnamurti que decía: Hay total seguridad en la inteligencia compasiva. Pero queremos seguridad en ideas, creencias, conceptos e ideales; nos aferramos a ellos, y esa es nuestra seguridad, por falsa o irracional que sea. Donde hay compasión, hay inteligencia suprema y hay seguridad. Cuando eres compasivo, cuando existe esa inteligencia, no hay cuestión de seguridad. Entonce