Extraña sensación de miedo

Extraña sensación de miedo aquella que me generó aquel que decidió en algún momento de su vida inventarse una misión, que no ha logrado cumplir según sus expectativas, y que hoy considera debe lograr cumplir otro porque él ya no quiere gastar su energía en eso, pero eso si, ese otro debe hacerlo estando a su servicio. 

¿A qué le temo?

Su conversación es aparentemente de amabilidad, con deseo de ayudar y tal vez este es el problema, la idea de que puede ayudar, y no de construir juntos, aunque en su mente parece ser una construcción juntos. De repente la conversación se torna en un favor hacia mi, algo que debo agradecer, agradecer la oportunidad que me está dando, cuando en realidad terminaría siendo explotado, sin posiblidad de ganar y al final culpable y señalado por no haber logrado cumplir su misión, la misión que hace años decidió asumir y que en algún momento de su vida dejó de querer, pero a la cual tampoco quiere renunciar, no quiere aceptar que fracasó, quiere creer que todo lo ha hecho muy bien, son los demás los que no lo comprenden. 

Tal vez allí está mi miedo, el miedo a devolverme a ese que era yo, creyendo que estaba haciendo mucho cuando la realidad me mostraba que no, convencido de ser muy bueno cuando en realidad no lo estoy siendo, es el miedo a mi, el miedo a ese ser que despreciaba su entorno, ahora por lo menos dudo y pienso si sigo siendo ese ser, si lo que estoy haciendo es despreciando una maravillos oportunidad por la ceguera de mi deber ser. 

Sin embargo las cifras son frías, me confirman que mi intuición es acertada, además de que sólo él puede cumplir esa misión, al final fue él el que decidió asumirla, así fuera por negocio, negocio que resultó no tan negocio como él quisiera, pero que le da lo suficiente para sentir que está muy bien. 

¿Qué es eso de sentirnos bien? 

El miedo también a la dificultad, a encontrarme tantos otros seres con esta misma actitud, pero por lo menos aseguraré que llevarlos con paciencia sea bien recompensado, al final tanto ellos como yo esperamos recibir una remuneración justa por el tiempo de trabajo invertido en hacernos comprender y avanzar. 

Sigo con el miedo, miedo a la apatía, a la irresponsabilidad, al creer que avanzo cuando en realidad retrocedo, por lo menos respecto a las misiones que yo mismo he elegido. 

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Buscando colegio para nuestra hija - Parte 2

Buscando colegio para nuestra hija - Parte 3

Buscando colegio para nuestra hija - Parte 1